Llegas y me dices con
la mirada perdida, hoy soy como humo negro. Y sé que ya el sol ese día no sale.
Que no es posible hacerte reír. Que el corazón lo tienes como gelatina
esparcida y el dolor se escapa en esa fumata negra. Y no digo nada porque tu
dolor acrecienta el mío y aun así lo hace insignificante…y yo también me
convierto en humo negro
Llevo meses sin leer
más de dos páginas seguidas, es como si el placer se escapara entre una niebla
camuflad…Quiero hacer realidad mis sueños y además creo que puedo
Pero cada embate
negativo de la vida, me convierte en humo negro. Y todo desaparece, los sueños
se escapan y se alojan en algún lugar de la memoria
El humo negro me hace
invisible para los demás y me alegro. Pero además también se filtra por mis
poros anegando mi interior de visiones borrosas y perturbadoras
Tengo una vida
delante me repito, tengo una vida…
Recurro a esa memoria
para ver soluciones de otros tiempos, pero también se funde con la niebla de
mis pasiones
Tal vez el problema
es sentir que los sentimientos se empeñan en tatuarme para no desaparecer
nunca, incluso cuando hacen daño
Dejadme…que soy humo
negro…y yo soy la que tiene que evaporarse para volver convertida en otra
realidad
A veces en medio del
humo, alguien me pone unas cadenas, y lucho como una fiera para arrancármelas
Y me imagino dentro
de 10, 15 años…bueno, más bien intento imaginármelo porque la imagen no la
visualizo, y yo sé que mañana será otro día. Volveré a ser fuerte y decidida.
Pero hoy…ahora…tan solo soy humo negro
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