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martes, 2 de octubre de 2012

Tenemos que hablar de Kevin


Ya lo dije hace unos días sobre el cine, ahora lo repito con los libros. Si quieres escribir sobre lo que has leído, hay que hacerlo nada más terminarlo. Se puede escribir más tarde sobre el contenido, argumento, etc. pero digamos...las sensaciones, los sentimientos que te convulsionan, algunas impresiones...es imposible reproducirlas después de un tiempo

Aún así, no puede dejar de hacer alusión a un libro que me mantuvo inquieta aún tiempo después de leerlo, y que reconozco me hubiera gustado tener algún tiempo más libre simplemente para pensarlo y digerirlo, supongo que algún día volveré a leerlo aunque ya no sea igual

Supongo que mucha gente tendrá noticias de “Tenemos que hablar de Kevin”, al menos por la promoción de la película. Yo no la he visto, pero nada será igual al libro. Desconocía totalmente la obra de Lionel Shiver (seudónimo de Margaret Ann Shiver)


Sinopsis: Eva es una escritora especializada en guías de viaje. Cuando queda embarazada de su pareja, Franklin, un fotógrafo dedicado a la publicidad, se abre ante ellos un nuevo horizonte de bonanza y felicidad. Sin embargo, ya desde su nacimiento, Kevin será fuente de preocupaciones y desasosiego, hasta convertirse en una amenaza para la estabilidad de Eva y su vida en común con Franklin

La prosa de esta mujer es increíble, consigue hilar un relato con la base de la maternidad entendida “a su manera” y que a mi al principio me resultó fascinante, ya que creo que la idea como tal está terriblemente magnificada y eso es un tremendo lastre para las mujeres. Entrelaza la novela la visión del mal, sabemos desde el principio que Kevin es un adolescente que comete una masacre días antes de cumplir los 16 años. Pero no nos engañemos, eso es solo la punta del iceberg

Lamento no haber guardado alguna de sus reflexiones sobre distintos temas, EEUU, convencionalismo, política, espacio personal, idea de la familia, del sexo...de la maternidad...intercala opiniones tan oportunas, tan certeras, que no sabes como se puede apilar cosas tan diversas en una historia tan hipnótica que no puedes dejar de leer

Según avanza el libro vas pasando por estados de ánimo distintos. Eva describe las cosas y tu las ves. Yo me sentí identificada en numerosas ocasiones, terminas amándola a pesar de que no es precisamente condescendiente con ella misma

Tiene algo de thriller, de perversidad, de sabiduría, de meditación. Lamento también no poder describir algunas de mis sensaciones durante su lectura

Sé que dejo aparte al personaje de Franklin y hasta de Kevin, pero espacio aparte, la fascinación mayor es por Eva, al menos para mi

Llegar al fin era una necesidad y casi un temor

Cuando se desvelaron algunas cosas del final, me sentí herida, tuve que releer un capítulo de nuevo, estaba aturdida y confundida, igual me lo tenía que haber imaginado, pero no

No siempre todo es lo que parece, un bebé tiene identidad propia, los límites de las personas también. En ese aturdimiento final, las últimas páginas que para otras personas eran comprensibles o eso me decían, a mí me dejaron aún más conmocionada, sentí algo así como rabia hacia Eva, esa mujer increíble que tomó una decisión y le cambió la vida. A mí el punto y final me pareció casi un sabotaje emocional...debe ser cosa de la edad

 

2 comentarios:

  1. Despues de leer tu reseña..dan ganas de comprarselo..aunque me parece q antes vere la peli..si no me dejan el libro antes..jajaja..fuerte abrazo amiga mia

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  2. Pues de momento sigue en mi casa...claro que antes o después tendré que devolverlo...abrazos también para ti compañero

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