La esperanza tiene nombre de niña, de valores de los que al final desconfiamos aún sabiendo que son los que valen. De un cierto aire de futuro contrapuesto a la pena del pasado. Y temes no dar la talla, y no corresponder…y hasta no saber lo que pasa por tu cabeza en eterna lucha entre la memoria y el olvido
Pero ahí está la esperanza, no podemos olvidarla
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