En algunos momentos que
me paro a pensar en como están las cosas, me acuerdo de un querido amigo que ya
no está, y que en estas circunstancias su blog echaría humo de indignación y
rabia. No sé si lo habría soportado
Los últimos tiempos del
partido socialista fueron complicados, no todo se había hecho bien y los
mercados se estaban poniendo díscolos. Recuerdo las primeras medidas
restrictivas tomadas con cierto cuidado como temiendo no cumplir órdenes
europeas y al mismo tiempo no sabiendo como transmitir a la población que el
momento lo requería. La aplastante mayoría del partido popular dejaba
constancia que la gente quería “un cambio”. La rabia y el miedo por la
situación hicieron pensar ingenuamente que el cambio sería para mejor
Aún hay gente que dice
que no tienen más remedio, que la situación lo requiere. No sé cuanto tiempo se
necesita para abrir los ojos. La derecha está disfrutando en su salsa. La privatización
ya había llegado a muchos estamentos debido a su poder en algunas comunidades
autónomas, pero ahora es un largo camino a la pérdida de derechos tan duramente
conseguida
A pesar de mi escasa
información lo veo, lo vivo a diario. Cada vez es más difícil no conocer a
alguien en situación crítica o ver en tus propias carnes que después de la
abundancia y el despilfarro, todas las puertas se cierran para ti. Ya no es
posible “echar una mano” de forma particular porque la necesidad crece en cada
esquina
Los cargos políticos
están exentos de ese apretarse el cinturón. Cada cambio de gobierno significa
el cambio de todos los cargos de confianza nombrados a dedo y que parece que
ninguna crisis cambia no solo la situación sino el número y la cercanía a los cargos en el poder

¡Es tanto!...prometo
intentar estar al día, al menos para dejar que mi rabia cobre forma. Hay gente
bien informada que pasará por aquí con sus artículos que nos plantean los temas
más actuales y contrastados
Aunque no olvido que en
esta tierra de nadie, el amor y la amistad son las premisas principales. La poesía
y los sentimientos no pueden salvar al mundo, pero si hacerlo más llevadero
Así que me voy a poner
en marcha, salir a ese mundo alborotado que intentaré no cambie al menos mi
conciencia
Ese buen amigo al que te refieres en el comienzo de tu reflexión..siempre decía aquello de que eran..estos..malos tiempos para la lírica..como rezaba el título de aquella canción del grupo vigués "Golpes Bajos" de mediados de los ochenta..abrazo fuerte para ti.. y un recuerdo cariñoso para aquel entrañable astur..
ResponderEliminarKerito, que se me pasó tu comentario, parezco un terremoto en una isla desierta...
EliminarNuestro amigo preferiría no ver el camino de retroceso que estamos recorriendo, pero sería unos de los abanderados de la resistencia (más o menos pasiva) que se opondría a tanto desatino
No es fácil, pero lo conseguiremos...