Los niños de la guerra

No sé si eres alguien, tu rostro se aparece en mis sueños con múltiples variaciones…pero eres tú, lo sé

Alrededor siempre hay oscuridad, o humo, o llamas, o sonidos de disparos…y sé que eres tú. No por verte nítidamente porque rechazo  las imágenes de los telediarios, pero a pesar de ello tu estás ahí

Cierro los ojos y sé que me miras. Tal vez me estés pidiendo ayuda. Puede que me mires con resentimiento o resignación

En todo caso sé que no me odias. Comprendes que no puedo hacer nada…(¿no?)

No reprochas. A veces tu gesto es de dolor, a veces de miedo…y no sé cuantas cosas más.

No puedo percibir si eres niño o niña. No importa. Hoy el rictus de tus labios es de rabia contenida. Tu mirada expresa claramente tu asombro ante la crueldad inútil de los seres humanos

Eres tú…ese niño que muere cada día en conflictos bélicos que no queremos ver…que nos cubren el alma con un engrudo de indiferencia

Una vez más, la memoria colectiva es violada repetidamente

Pienso que no tenemos salvación…pero tu, una vez más, apareces en mis sueños…y comprendo que nos has perdonado